La dirección de Volvo Trucks lanzó el jueves una serie de amenazas provocadoras contra los trabajadores en huelga en Virginia, en un último esfuerzo por intimidarlos para que acepten un acuerdo laboral de seis años elaborado con el sindicato United Auto Workers (UAW). Casi 3.000 trabajadores, que llevan más de un mes en huelga en la planta de New River Valley en Dublín (Virginia), van a votar hoy una tercera propuesta respaldada por el UAW.

Como muestra de la creciente oposición de los trabajadores a nivel internacional, los trabajadores de la planta de Volvo Cars en Gante (Bélgica) paralizaron la producción en una acción salvaje el jueves, en protesta por los planes de la empresa de aumentar la semana laboral con el acuerdo de los sindicatos. Volvo Cars es ahora una empresa separada de Volvo Trucks, pero las plantas de las dos empresas siguen estando cerca la una de la otra en Gante.

Volvo es consciente de la enorme oposición de los trabajadores de Virginia al último acuerdo, que es poco más que un refrito de los dos primeros acuerdos que los trabajadores rechazaron por un 90% en mayo y junio. El UAW está tratando de vencer la resistencia de los trabajadores a la última propuesta, que mantiene el sistema de salarios y beneficios de dos niveles, aumenta drásticamente los costos de atención médica de bolsillo para los trabajadores actuales y jubilados, y limita los aumentos para los trabajadores 'básicos' a un promedio del 2% anual, muy por debajo de la tasa de inflación.

La pregunta principal en la sección de preguntas y respuestas de la página web de la planta de Volvo en New River Valley 'Actualización de las negociaciones' del 8 de julio pregunta: '¿Qué pasa si se rechaza el tercer acuerdo provisional?'.

La respuesta es: 'Es importante señalar que hemos comunicado a los dirigentes del UAW que volveríamos al segundo acuerdo provisional —no al tercero— como base para cualquier otra discusión salarial'.

Continúa diciendo: 'Es poco probable que podamos llegar a un cuarto acuerdo tentativo antes del paro vacacional, por lo que los empleados no cobrarían las vacaciones elegibles que estaban programadas para ser utilizadas durante el paro vacacional si no hubiera habido un paro laboral'.

La empresa concluye afirmando que la continuación de la huelga pondría en peligro su ampliación de $400 millones de la planta de New River Valley, en una clara amenaza para los empleos de los trabajadores. 'Por último, debido a la incertidumbre creada por no tener un contrato, ya hemos cancelado la inversión que habría trasladado los recortes de cabina a la planta 2'. Y añade: 'El impacto en el resto de los proyectos no está claro en este momento, y el riesgo de que se rechacen futuras inversiones crecería a medida que se prolongue la incertidumbre operativa'.

La multinacional con sede en Suecia, que obtuvo más de $1.000 millones de beneficios en el primer trimestre de 2021 y entregó una cantidad récord de pagos de dividendos a sus acaudalados inversores, está tratando de poner una pistola en la cabeza de los trabajadores, declarando de hecho: 'Acepten más concesiones, o les robaremos sus magros aumentos, les quitaremos su paga de vacaciones y tal vez les quitemos el trabajo'.

El presidente del UAW, Ray Curry, y el sindicato local 2069 no han dicho nada sobre el intento de chantaje de la empresa. Esto se debe a que son coconspiradores en la campaña para hacer tragar el contrato a los trabajadores. Los funcionarios del UAW se han negado a publicar el contrato completo para que los trabajadores lo lean y lo estudien, y se están apresurando a realizar una votación, apenas una semana después de anunciar el acuerdo provisional.

Los trabajadores de base se mantienen desafiantes y decididos a derrotar el contrato. 'Es obvio que intentan intimidarnos', respondió un trabajador en huelga. 'Vuelven a utilizar la táctica del miedo de 'nos vamos a trasladar a México'. Esto podría cabrear a la gente lo suficiente como para que obtengamos un rechazo aplastante. Deberíamos responder con otro 90% de votos negativos para demostrarles que vamos en serio y que no nos asustan sus amenazas'.

El trabajador añadió: 'El sindicato afirma que el contrato completo está en la trastienda de la sala sindical. Pero he visto varios mensajes en Facebook de trabajadores que han ido a la sala para verlo, y los funcionarios locales del sindicato dicen que no está allí o que tienen que esperar a que aparezca otro funcionario para poder verlo'. Los trabajadores están hartos del UAW'.

Refiriéndose a las amenazas de la empresa, otro trabajador dijo: 'Están intentando asustarnos para que votemos a favor. Si votamos en contra, van a decir: 'Hemos detenido toda la construcción y vamos a buscar nuestra nueva planta en otra parte'. Les garantizo que eso es lo que dirán si votamos en contra.

'Muchos de los trabajadores más jóvenes perderán mucho dinero si vuelven a la segunda AT, diablos, yo perderé entre 2 y 3 dólares la hora. Pero tenemos que hacer correr la voz para no dejarnos intimidar por estas amenazas y votar en contra'.

La oposición tanto a la empresa como al UAW ha sido liderada por el Comité de Base de los Trabajadores de Volvo (VWRFC). En vísperas de la votación de hoy, el VWRFC ha emitido una declaración en la que exige la publicación del contrato completo y de todas las cartas complementarias, con tiempo suficiente para que los trabajadores lo estudien y discutan antes de cualquier votación. El comité ha hecho un llamamiento a los trabajadores para que rechacen el acuerdo de venta y amplíen la huelga a las plantas Mack-Volvo de la empresa y a todo el sector del automóvil.

La acción de los trabajadores belgas demuestra que es posible una acción unida. En los últimos días, los trabajadores de Volvo han establecido conexiones y han recibido el apoyo de los trabajadores de las plantas de Mack-Volvo en Pensilvania y Maryland; de las principales plantas de automóviles en Detroit, Chicago y otras ciudades; y de las operaciones internacionales de Volvo, incluidas las de Australia, Canadá y Bélgica.

A principios de esta semana, los activistas del WSWS y de los Partidos Socialistas por la Igualdad en Europa encontraron un amplio apoyo a los trabajadores en huelga por parte de los trabajadores belgas del gigantesco complejo de la empresa en Gante, dos días antes del paro en Volvo Cars.

(Artículo publicado originalmente en inglés el 9 de julio de 2021)