El fin de semana, el comité militar de la alianza de la OTAN se reunió para planificar la siguiente etapa de su guerra contra Rusia, y el máximo responsable de la política militar de la alianza pidió que se permita a Ucrania utilizar armas de la OTAN para atacar dentro de Rusia.

El almirante Rob Bauer, presidente del Comité Militar de la OTAN, argumentó que la OTAN tenía el derecho legal de facilitar ataques contra el territorio continental ruso. “Toda nación que es atacada tiene derecho a defenderse. Y ese derecho no se detiene en la frontera de su propia nación”, dijo Bauer.

Continuó: “Queremos debilitar al enemigo que nos ataca para no solo luchar contra las flechas que se nos presentan, sino también atacar al arquero que, como vemos, muy a menudo opera desde Rusia directamente hacia Ucrania”.

Añadió: “Así que, militarmente, hay una buena razón para hacer eso, para debilitar al enemigo, para debilitar sus líneas logísticas, el combustible, la munición que llega al frente. Eso es lo que queremos detener”.

Las declaraciones de Bauer fueron parte de un torrente de demandas desde dentro del establishment político y los medios de comunicación de Estados Unidos y Europa para una mayor escalada de la OTAN contra Rusia.

La reunión del comité militar de la OTAN siguió a una reunión de alto nivel el viernes entre el presidente estadounidense Joe Biden y el primer ministro del Reino Unido Keir Starmer, que discutió la cuestión de permitir que Ucrania ataque dentro del territorio ruso.

Los medios de comunicación estadounidenses y británicos informaron durante la semana que ya se había tomado la decisión de permitir que Ucrania atacara a Rusia con armas de la OTAN. Inicialmente, se esperaba el anuncio después de la reunión del viernes. Finalmente, Biden y Starmer no hicieron ningún anuncio público, y ahora se espera que los ataques comiencen a finales de este mes.

El jueves, el día antes de la reunión de Biden y Starmer, el presidente ruso, Vladimir Putin, advirtió que la decisión de permitir que Ucrania use armas de la OTAN para atacar profundamente al interior de Rusia significaría la entrada de la OTAN en la guerra con Rusia.

'Si se toma esta decisión, significará nada menos que la participación directa de los países de la OTAN, Estados Unidos y los países europeos, en el conflicto en Ucrania', dijo, y agregó: 'Su participación directa, por supuesto, cambia significativamente la esencia misma, la naturaleza misma del conflicto'. El día después de que Putin habló, Rusia anunció la expulsión de seis diplomáticos del Reino Unido.

Durante el fin de semana, el expresidente ruso, Dmitry Medvedev, explicó la importancia de las declaraciones de Putin, diciendo que Putin esbozó los 'prerrequisitos formales' para una decisión de Rusia de usar armas nucleares. Cualquier decisión de ese tipo, dijo, sería “comprensible para toda la comunidad mundial y coherente con nuestra doctrina de disuasión nuclear”.

Medvedev advirtió que “una respuesta nuclear es una decisión extremadamente difícil con consecuencias irreversibles”, y la posición actual de la OTAN corre el riesgo de convertir a Kiev en un “gigante punto gris derretido”.

Después de su reunión con Starmer, se le preguntó a Biden sobre la amenaza de guerra entre Rusia y Estados Unidos, a lo que respondió: “Cállate”, y declaró que no “piensa” en Vladimir Putin.

Las declaraciones del almirante Bauer en apoyo de los ataques de Ucrania a Rusia con armas de la OTAN tuvieron lugar durante una reunión de alto nivel dedicada a la planificación de la escalada de la guerra de la OTAN con Rusia.

La reunión anual de la Conferencia del Comité Militar, que tuvo lugar en Praga, describió los esfuerzos sistemáticos de la OTAN para expandir su base industrial militar y de defensa para prepararse para una guerra de alta intensidad.

En sus comentarios de apertura, Bauer dijo: “Las Autoridades Militares de la OTAN tienen dos tareas hercúleas que deben emprender simultáneamente. Mientras continuamos e incrementamos nuestro apoyo a Ucrania, también debemos reforzar nuestra propia disuasión y defensa”.

Bauer señaló que esta fue la primera reunión del comité militar de la OTAN desde la cumbre de julio en Washington, en la que se acordó implementar una expansión radical de las fuerzas militares de la OTAN en Europa del Este.

Bauer dijo: “Cuando celebramos esta conferencia del comité en Oslo el año pasado, los nuevos planes de defensa de la OTAN, la llamada Familia de Planes DDA, acababan de ser aprobados. La OTAN ahora tiene 500.000 tropas en alta disponibilidad, establecimos la Fuerza de Reacción Aliada. Estamos adaptando nuestra estructura de Mando y Control y los Aliados están desarrollando y expandiendo rápidamente sus capacidades”.

Cada vez es más claro que la expansión de la política arriesgada de la OTAN en Ucrania está impulsada por el deterioro de la situación militar para el esfuerzo bélico ucraniano.

En una evaluación sobria del estado actual de la guerra, el columnista del Washington Post David Ignatius advirtió: “Ucrania se está desangrando. Su voluntad de luchar es tan fuerte como siempre, pero su ejército está exhausto por una incesante guerra de drones que no se parece a nada en la historia de la guerra. ... Ucrania no tiene suficientes soldados para luchar en una guerra de desgaste indefinida”.

Pero la solución de Ignatius es que Biden amplíe masivamente la lista de objetivos rusos que pueden ser atacados por Ucrania utilizando armas de la OTAN. “Si Rusia continúa con su ofensiva, las bases de Putin dentro del alcance de los ATACMS deberían ser objetivos legítimos. Él es el que cruza la ‘línea roja’ cada día que continúa con su agresión no provocada”, declaró.

Al mismo tiempo, los países de la OTAN están tomando medidas para obligar a los ucranianos que huyeron de la guerra a regresar a Ucrania para servir como carne de cañón.

El viernes, Radoslaw Sikorski, ministro de Asuntos Exteriores de Polonia, visitó Kiev para pedir el fin de todos los pagos de asistencia social a los refugiados ucranianos que viven en Europa. “Dejen de pagar esos pagos de seguridad social a las personas que son elegibles para el reclutamiento ucraniano. No debería haber incentivos financieros para evitar el reclutamiento en Ucrania”, dijo Sikorski.

Continuó: “No es un derecho humano que le paguen por evitar el reclutamiento, por defender a su país. Nosotros en Polonia no lo hacemos”.

El ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Andrii Sybiha, recibió con agrado el llamado de Sikorski y dijo: “Es hora de plantear realmente la cuestión de que la Unión Europea desarrolle programas para que los ucranianos regresen a casa”.

(Artículo publicado originalmente en inglés el 15 de septiembre de 2024)