La siguiente es una carta abierta del Comité de Base de los Trabajadores de Volvo (VWRFC) en la planta de New River Valley en Dublín, Virginia, dirigida al presidente Internacional del UAW, Rory Gamble, al secretario-tesorero del UAW, Ray Curry, y al presidente del Local 2069 del UAW, Matt Blondino. Los trabajadores de Volvo y Mack pueden ponerse en contacto con el VWRFC en volvowrfc@gmail.com o enviar un mensaje de texto al (540) 307-0509.

Carta abierta al presidente internacional del UAW, Rory Gamble, al secretario-tesorero del UAW, Ray Curry, y al presidente del UAW Local 2069, Matt Blondino

14 de junio de 2021

A Rory Gamble, Ray Curry y Matt Blondino:

El lunes 7 de junio, el UAW Internacional nos llamó a los trabajadores de la planta de Volvo Trucks New River Valley a la huelga por segunda vez en dos meses. La huelga se produjo después de que rechazáramos el segundo acuerdo provisional con Volvo que ustedes sometieron a votación. Rechazamos tanto el primer como el segundo acuerdo provisional por un margen abrumador: entre el 90 por ciento y el 91 por ciento.

Llevamos una semana en las líneas de piquete, pero ustedes no han dicho a los trabajadores de base por qué lucha el sindicato, en qué se diferenciará el próximo acuerdo de los dos anteriores y cómo pretende el UAW ganar esta huelga.

Nosotros, los trabajadores de base de Volvo NRV, exigimos respuestas a las siguientes preguntas

1. ¿Cuáles son sus demandas en las negociaciones con Volvo?

Queremos saber con exactitud qué es lo que piden a Volvo. Hasta ahora, sólo hemos oído que, en palabras de Ray Curry, estáis comprometidos con un acuerdo que "funcione tanto para la empresa como para sus empleados".

Pero si hubiera un acuerdo que "funcionara" tanto para la empresa como para los trabajadores, no habría huelga. Volvo quiere seguir repartiendo miles de millones a sus inversores y ejecutivos. Después de décadas de concesiones, queremos un salario decente, asistencia sanitaria y seguridad para los jubilados.

El índice de precios al consumo de Estados Unidos, la medida de la inflación anual, subió al 5% el mes pasado. Esto significa que nuestros salarios anuales deben aumentar un 5 por ciento sólo para mantener el ritmo de los crecientes costes de los alimentos, la gasolina, la ropa y otras necesidades básicas. El último contrato que rechazamos aumentaba los salarios de los más altos una media de sólo el 2 por ciento anual, lo que significa que tanto los trabajadores del grupo básico como todos los que eventualmente lleguen a la cima de la escala salarial estarían perdiendo cantidades sustanciales de dinero.

Curry añadió que hay "muchos temas" sin resolver, como "los aumentos salariales, la seguridad laboral, la progresión salarial, los oficios especializados, las primas por turno, los horarios de vacaciones, la salud y la seguridad, la antigüedad, la pensión, el 401(k), la cobertura sanitaria y de medicamentos y las horas extraordinarias". Es decir, ¡todo lo que aceptaron en los convenios anteriores! Pero el diablo está en los detalles, y Curry no dijo nada sobre lo que el UAW propone ahora.

Por lo tanto, díganos: ¿Cuál es, precisamente, su plan de salarios? ¿Exigen una cláusula de coste de la vida para hacer frente a la inflación? ¿Qué proponen para acabar con el sistema de salarios y prestaciones de varios niveles y mantener la jornada de ocho horas? Qué hace para garantizar los intereses de los jubilados?

2. ¿Por qué sólo pagan 275 dólares semanales en concepto de huelga?

La dirección del Local 2069 ha dicho que sólo recibiremos 275 dólares en concepto de paga de huelga, y que los cheques "deberían" estar disponibles el 21 de junio. Saben que no podemos vivir con estos ingresos, que ni siquiera alcanzan el nivel de pobreza federal. Y para colmo, la empresa nos ha cortado la asistencia sanitaria, y el UAW sólo cubre los servicios más mínimos, y muchos de nosotros no podemos hacernos cargo de los gastos de las recetas debido a una supuesta "caída del sistema".

Un salario de huelga digno no es sólo una cuestión de supervivencia económica. Es necesario demostrar a la empresa que estamos dispuestos a luchar.

No estamos en los años 30. El UAW no es una operación de difícil acceso. Es una institución masiva con inmensos recursos. Sólo el fondo de huelga asciende a tres cuartos de billón de dólares. La Internacional está dotada de una gigantesca burocracia, cuyos miembros están generosamente sobrecompensados. Sabemos por las declaraciones del UAW en 2020 ante el Departamento de Trabajo que la nómina oficial del año pasado en la sede nacional superó los 80 millones de dólares.

Hay 17 funcionarios del UAW que ganan más de 200.000 dólares al año, y más de 450 que ganan más de 100.000 dólares. El ingreso semanal promedio del personal nacional del UAW es de más de 2.300 dólares por semana, más de ocho veces lo que estamos recibiendo en la paga de la huelga. También figuran en la nómina funcionarios cuyos ingresos figuran en la sección "actividades políticas y de cabildeo". El UAW gasta enormes recursos en financiar a políticos demócratas, incluido Biden. Pero, ¿cómo nos hemos beneficiado exactamente de todo esto? Los demócratas afirman que están "a favor de los trabajadores", pero no nos parece que nada cambie si son los demócratas o los republicanos los que están en el poder. Aquí en Virginia, es un gobernador demócrata y amigo de Franky Marchand, Ralph Northam, quien está dando instrucciones a la policía para que ayude a la empresa a traer trabajadores esquiroles para romper nuestra huelga.

Además, el UAW gastó 2,3 millones de dólares en honorarios legales en 2019 para defender a funcionarios corruptos culpables de robar el dinero de nuestras cuotas a cambio de impulsar contratos favorables a la empresa.

No podemos dejar de señalar, Rory Gamble, que usted debe su posición actual al hecho de que dos de sus predecesores, Dennis Williams y Gary Jones, están ahora (o a punto de estar) en prisión. Jones acaba de ser condenado por desviar el dinero de las cuotas de los trabajadores para pagar lujosas comidas y, entre otras cosas, 60.000 dólares en cigarros para los burócratas del UAW (el equivalente a la paga semanal por huelga de 218 trabajadores).

El UAW también gastó más de 6 millones de dólares el año pasado para reformar la "Casa de la Solidaridad" en Detroit. Esta suma es casi igual a dos meses de paga de huelga para los 2.900 trabajadores, a 275 dólares semanales. Gastó otros 3,5 millones de dólares en la construcción de sus oficinas en Illinois y Washington D.C.

Discúlpenos, pero parece que tiene sus prioridades equivocadas. En lugar de gastar dinero en reformar sus oficinas en la Avenida Jefferson de Detroit y proporcionar un estilo de vida privilegiado a cientos de burócratas, los recursos del UAW, construidos con el dinero de nuestras cuotas, deben utilizarse para mantener nuestra huelga.

3. ¿Cuál es su estrategia para la victoria?

Esto nos lleva a la pregunta más importante: ¿Cuál es la estrategia para ganar esta huelga? Volvo tiene una estrategia para la victoria y está preparada para la batalla. La empresa no sólo nos ha cortado la asistencia sanitaria, sino que también está utilizando a la policía para traer a trabajadores esquiroles y mantener las operaciones en marcha. Es una multinacional con ingresos anuales de más de 40.000 millones de dólares. Sabe que si se nos hace pasar hambre en el piquete durante un tiempo suficiente, nos veremos obligados a aceptar lo que exige.

Pero la empresa también es muy vulnerable. Volvo ha dicho a sus accionistas que tiene pocas existencias de camiones nuevos. Está obligando a realizar despidos temporales en la planta Mack de Hagerstown debido a la escasez de suministros, y los trabajadores de allí nos han dicho que existe un fuerte sentimiento de lucha unida contra la empresa.

La fuerza de una huelga reside en la capacidad de los trabajadores, mediante una acción unida, de infligir un daño económico y político significativo a la empresa. Entonces, ¿cuál es su estrategia? ¿Qué están haciendo para socavar las operaciones de Volvo aquí en los EE.UU., incluidas las plantas de camiones Volvo Mack en Salem, Virginia; Hagerstown, Maryland; y Allentown, Pennsylvania, donde sabemos que la huelga tiene un enorme apoyo?

El UAW cuenta con 400.000 miembros en Estados Unidos, Canadá y Puerto Rico. Está afiliada a la AFL-CIO, que cuenta con más de 12,5 millones de miembros. ¿Qué se está haciendo para movilizar a estos trabajadores, que se enfrentan a los mismos problemas que nosotros?

En este contexto, observamos que la página de Facebook del UAW Internacional ni siquiera ha publicado un aviso sobre nuestra lucha. Los trabajadores de otras plantas, incluidos los representados por el UAW, nos han dicho que ni siquiera saben que estamos en huelga.

Además, Volvo es una empresa internacional, con decenas de miles de trabajadores en Europa, Asia, África y América Latina. Sin embargo, ustedes no hacen ningún esfuerzo para contactar e informar a los trabajadores de todo el mundo sobre nuestra lucha.

Ustedes dicen ser nuestros representantes, pero vemos que en todos los frentes sus acciones están socavando nuestra huelga.

Matt Blondino dice que la huelga continuará hasta que se ratifique un acuerdo. Dado que no nos ha dicho nada de lo que propone que sea diferente de los acuerdos que hemos rechazado, esto parece más una amenaza contra nosotros que contra la empresa. Nos estáis diciendo que seguiremos aislados y pasando hambre en los piquetes hasta que aceptemos lo que ya hemos rechazado.

No vamos a quedarnos sentados y dejar que esto ocurra. No vamos a permitir que Volvo, con vuestra colaboración, intente darnos una lección y castigarnos por haber votado dos veces en contra de vuestros contratos.

Durante los últimos 40 años, desde las concesiones a Chrysler otorgadas por el entonces presidente de el UAW, Douglas Fraser, en 1979, todos los contratos han implicado devoluciones masivas y no recuperadas a las empresas por parte del UAW. En el pasado, esto se justificaba por la necesidad de "salvar" la empresa. Ahora las concesiones continúan incluso cuando estas empresas están obteniendo enormes beneficios, como en el caso de Volvo.

Hemos presentado nuestras preguntas, ahora aquí están nuestras demandas:

En primer lugar, exigimos saber, en detalle, qué es lo que proponen. Reiteramos aquí las demandas mínimas que esbozamos en nuestra carta abierta del 20 de mayo, que usted decidió ignorar:

• Un aumento salarial inmediato del 25 por ciento para restaurar los ingresos perdidos en los últimos tres contratos, más un aumento salarial del 6 por ciento anual

• Una cláusula adicional de COLA para aumentar los salarios en línea con los precios crecientes de los bienes de consumo

• Mantener las tarifas y la cobertura actuales del seguro médico

• Prestaciones sanitarias totalmente pagadas para los jubilados, sin copagos ni primas

• Acabar con el sistema salarial de varios niveles y transferir a todos los trabajadores al nivel salarial y de prestaciones más alto

• Eliminar el horario de trabajo alternativo, mantener la jornada de ocho horas y mantener las normas actuales sobre horas extraordinarias

• Cinco días personales para todos los trabajadores, no sólo para los asalariados

• Una prima de ratificación de contrato de 4.000 dólares

En segundo lugar, exigimos que el UAW movilice a todos sus miembros en apoyo de esta huelga, comenzando por el cierre de todas las operaciones de Volvo en Estados Unidos. El UAW también debería solicitar directamente el apoyo de los trabajadores de las instalaciones de Volvo en todo el mundo. Sabemos, por nuestras propias conversaciones con los trabajadores, que cuando se enteran de nuestra huelga, están deseando apoyarla y unirse a la lucha.

En tercer lugar, exigimos negociaciones abiertas. Nada bueno ocurre en secreto. Todas las discusiones con la empresa deben ser supervisadas por un representante de los trabajadores de base. No aceptaremos otro contrato tramado a nuestras espaldas. Debe haber reuniones masivas de afiliados al menos dos veces por semana con un micrófono abierto para que todos tengamos la oportunidad de hacer preguntas y que se nos respondan.

En cuarto lugar, exigimos un ingreso completo para todos los trabajadores en huelga, que comience de inmediato, pagado por el fondo de huelga del UAW construido con nuestras cuotas sindicales. No vamos a pasar hambre en la línea de piquetes mientras ustedes conspiran con la empresa para imponer un acuerdo aún peor que los que rechazamos.

En quinto lugar, no aceptaremos otro intento de forzar un contrato con mentiras y amenazas.

Cualquier nuevo acuerdo debe ser proporcionado en su totalidad a todos los trabajadores con dos semanas para que podamos revisar y discutir antes de una votación. La huelga debe continuar hasta que hayamos conseguido nuestras demandas, y no aceptaremos que la suspendan sin nuestra aprobación como hicieron la última vez.

Exigimos que se trace una línea en la arena, que esta huelga se traduzca en una clara victoria para los trabajadores. Si se les informa de nuestra lucha, los trabajadores de todo el país y, de hecho, de todo el mundo, entenderán que es en interés de todos los trabajadores. Entenderán que esta es una huelga no sólo para nosotros, sino para el futuro. Una lucha exitosa aquí en Volvo fortalecerá a todos los trabajadores de la industria automotriz y, de hecho, a toda la clase obrera.

Si no están preparados para llevar a cabo esta lucha, entonces salgan. Las bases elegirán un comité de negociación y de huelga propio que esté preparado para llevar a cabo la lucha que se requiere.

Exigimos una respuesta.

Atentamente,

Comité de base de los trabajadores de Volvo

(Artículo publicado originalmente en inglés el 14 de junio de 2021)